Por
JESUS HERNANDEZ CUELLAR
Durante décadas, Cuba y el
mundo han escuchado la historia de los 640 atentados contra el dictador cubano
Fidel Castro. Ahora, el general retirado Fabián Escalante, ex jefe de la
contrainteligencia militar cubana, ha lanzado un libro sobre lo que llama el magnicidio
de estado, con el título de "Fidel, Kennedy y Chávez, una historia
inconclusa de asesinato político".
"Los mismos que
asesinaron a (John F.) Kennedy (presidente de Estados Unidos, en 1963) han
querido asesinar a Fidel Castro y quieren asesinar a Hugo Chávez", afirmó
Escalante. "¿De quién estoy hablando? De los servicios de inteligencia de
Estados Unidos, de la mafia cubano-estadounidense, los mismos personajes",
declaró.
En cualquier parte del
mundo, un niño de cuarto grado de enseñanza primaria ya sabe dividir. La
operación matemática es simple. Fidel Castro ha estado en el poder durante 47
años. Si un niño de cuarto grado divide 640 atentados por 47 años, el resultado
es 13.6 atentados por año. Como un niño de cuarto grado ya sabe que un año tiene
12 meses, la cuenta arroja que Fidel Castro ha sido objeto de más de un
atentado por mes, todos los meses, durante casi medio siglo.
¿Resistiría Superman ese
ritmo de atentados durante tanto tiempo?
Peor aún. Se dice que en
realidad los atentados ocurrieron mayormente durante los primeros años del
régimen de Castro. Digamos que durante los primeros 20 años que van de 1959 a
1979. El mismo niño toma la calculadora, hace la operación y el resultado es de
32 atentados por año, lo que es igual a casi tres atentados mensuales.
Nada, hombre, no hay por
qué asombrarse. Se trata de matemáticas comunistas, similares a las que
aparecen diariamente en la portada del periódico oficial Granma respecto a la
producción de toneladas de papas, boniatos y carne, que ningún cubano ve ni
come.
Efectivamente, Fidel
Castro ha sido objeto de atentados, algunos de ellos ordenados en la década de
los años 60 por la Agencia Central de Inteligencia (CIA), según documentos
públicos del propio gobierno de Estados Unidos. Estos últimos no pasan de media
docena. Los otros, organizados por grupos anticastristas dentro y fuera de
Cuba, son más difíciles de documentar.
Estas cifras del castrismo
son también similares a las que se utilizaron en 1959 sobre los asesinatos
políticos de la dictadura de Fulgencio Batista, para justificar las ejecuciones
revolucionarias de los primeros tiempos. En aquella época se creó el mito de
que Batista había asesinado a 20 mil cubanos. Batista huyó de Cuba cuando le
faltaban dos meses y 10 días para cumplir siete años en el poder. Si el mismo
niño toma la calculadora y divide 20 mil por siete -los dos meses y 10 días van
de propina -, el resultado es de dos mil 857 muertos por año, es decir, casi
ocho muertos por día, unos 235 muertos por mes. Nadie que haya vivido en su
sano juicio durante la dictadura de Batista, recuerda esa cantidad de muertos.
Una relación de aquella
época, efectuada por el coronel Ramón Barquín, militar opositor a Batista,
refleja un total de 2,495 muertes, 968 de personeros de la dictadura
batistiana, y 1,527 de opositores revolucionarios, durante todo el régimen de
Batista.
O tal vez esos números de
atentados y muertos se deban a que estamos hablando de las matemáticas del
"país más culto del mundo", que desafortunadamente resultan
incomprensibles para el común de los mortales que vivimos atrofiados por las
estadísticas del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional.
No hay comentarios:
Publicar un comentario