Por
Horacio Nolasco
Los casos del ex jugador de Grandes Ligas dominicano Juan
Domínguez y del ex prospecto Matt Bush nos han llamado sobremanera la atención,
no por ser modelos a seguir, sino por haber desperdiciado su vida y su talento.
El caso del norteamericano
Matt Bush ha llamado más la atención por ser un jugador norteamericano y que
fue un pelotero con las herramientas suficientes para no fallar. Bush estuvo en
prisión durante tres años y medio, al herir gravemente a una persona cuando
manejaba borracho en marzo del 2012.
En el 2004 Bush fue
seleccionado como el primer jugador por los Padres de San Diego en el Sorteo de jugadores amateurs, seguido en
ese draft por el megadivo Justin Verlander y Philip Humbert. Matt Bush fue una
muestra más de jugadores que fracasan al ser seleccionados en primera ronda,
pues no jugó más allá de Doble A. Los problemas de Bush con el alcohol se
remontan al 2004, incluyendo cargos por un pleito en un bar, apenas semanas
después de firmar al profesionalismo.
La situación de Bush se
parece un tanto a la de Josh Hamilton,
también primera selección de draft en 1999 y quien ha tenido todo tipo de
problemas por consumo de drogas y alcohol. Hamilton ha ganado más de 80
millones de dolares (más 56 millones pendientes hasta el 2018), pero igual ha
tirado su vida por la borda.
Bush ha recibido una nueva
oportunidad al firmar en diciembre un contrato de Liga Menor con los Vigilantes
de Texas, lanzando actualmente con el
equipo Frisco, Doble A.
Juan Domínguez es un ex lanzador dominicano que ha
salido a la luz pública gracias a un
reportaje realizado por el destacado cronista deportivo Héctor Gómez, señalando
las malas condiciones en que se encuentra el ex jugador, como resultado del
consumo de drogas y alcohol.
Domínguez fue un prospecto
de los Vigilantes y estuvo lanzando en las Mayores entre el 2003 y el 2005.
Tenía mucho talento y su recta alcanzaba cerca de las 100 millas.
Algunas personas, entre
ellos un amigo particular, se trasladaron este domingo a Esperanza, provincia Valverde, para suministrarle a Domínguez ropas, alimentos
y gestionarle un tratamiento de desintoxicación y rehabilitación a través de
la BAT (Baseball Assistance Team, una
institución de ayuda ligada a las Grandes Ligas). Domínguez no tendrá que pagar
un centavo en su proceso de rehabilitación psiquiátrica y sicológica, además de
gestionarle su pensión a la edad mínima de
45 años (tiene 36 años actualmente).
Domínguez y Bush, aunque en escenarios diferentes, tendrán una
segunda oportunidad, en el béisbol en el
caso de Bush y en la vida en el caso de Domínguez.
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