La pintoresca casa de Pablo Josué Amador en el sur de Miami-Dade era una de esas casas cálidas y acogedoras que inspiran a los vecinos a detenerse y escuchar las risas de sus hijos.
La música de los instrumentos de los muchachos salía por las ventanas en el atardecer cuando ensayaban juntos y los padres del vecindario traían a sus hijos para que recibieran lecciones de piano.
El único indicio el miércoles de que algo siniestro ocurría en la casa está en las páginas de MySpace y Facebook de sus hijas.
"Lloro/me duele adentro. No sé cómo lidiar con esto. No voy siquiera a intentarlo más'', escribió Beula "Bea'' Beatriz Amador, la hija de 20 años de Amador, en su página de Facebook a la 1 de la madrugada del miércoles.
No está claro qué la preocupaba. Pero en menos de seis horas su padre, ex tenor de
Su hija mayor, Bea, que estudia en
Los investigadores encontraron un arma en la casa. No ofrecieron información sobre los motivos de los hechos pero las páginas de MySpace y Facebook sugieren que estaban preocupadas.
"He pasado mucho pero trato de mantenerme fuerte, porque el mundo entero se me está cayendo encima y tratar de ignorarlo me duele cada vez más'', escribió Priscila en MySpace.com. "Por eso ya no me importa''.
El asesinato-suicidio dejó atónitos a los vecinos en la comunidad Palmetto Country Club Estates donde vivía la familia, así como a sus amigos en la iglesia de Perrine.
Liz Warriner, que asiste a
"Todos los chicos tenían mucho talento musical. Hace un año hicieron una obrita cómica en la iglesia. Todos estaban en una banda'', dijo Warriner. "Parecían una familia muy unida''.
Los hijos eran los músicos y el padre el director.
Pablo Josué Amador era director musical, arreglista y vocalista del grupo Los Galileos, una agrupación de seis miembros que incluía a sus hijos. El grupo participó en docenas de eventos en iglesias del sur de
Amador escribió en la ese sitio web que había cantado en el coro de
Amador comenzó sus estudios en el Conservatorio de Música Alejandro García Caturla en
Los vecinos dijeron que con frecuencia escuchaban a sus hijos ensayando en la casa para las presentaciones.
"Las cosas siempre parecían muy armoniosas. Es por eso que estoy completamente atónita'', dijo Soraya Peer, que vive al otro lado de la calle.
Fuente: elnuevoherald.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario