Los frecuentes conflictos internos en el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) cansan al pueblo dominicano, mientras las bases del partido quieren una oposición de línea dura contra el gobierno peledeista.Enfrentamientos entre grupos impidieron dos reuniones de la comisión politica del partido blanco en las que se fijaría la posición oficial del partido de oposición sobre la cumbre que convocó el presidente Leonel Fernández.
Sin embargo, dirigentes históricos del PRD participaron en la cumbre paralela que inauguraron grupos populares y comunitarios, pequeños y medianos empresarios y un elevado número de organizaciones que cuestionan la administración del presidente Leonel Fernández.
En sondeos radiales y televisivos se insistió en que el PRD debió tomar una decisión sobre la cumbre, fuera o no la participación en esos eventos.
El fracaso de esas reuniones, dicen ciudadanos, confirman nuevamente que las tendencias siguen enfrentadas en el perredeismo.
El que fijó posición pública sobre la cumbre que convoco Fernández es Miguel Vargas, quien lo hizo en un comunicado divulgado en medios escritos.
En el caso del ex presidente Hipólito Mejía, proclamó que ni cerca pasaría por el lugar donde el gobierno celebra su cumbre.
El fracaso de las reuniones fue utilizado por algunos dirigentes del PRD para lanzar duros ataques contra la gestión del ingeniero Ramón Alburquerque en la presidencia del partido blanco.
En el caso del secretario general del PRD, Orlando Jorge Mera, se quejó esta semana de que intereses personales atascan el PRD. Primicias.
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