El tema es realmente
preocupante. Cientos de dominicanos se han quedado sin hogares, se han
registrado pérdidas millonarias en la agricultura y la agropecuaria.
Parte de los trabajos del
próximo año y todo lo que resta de este en el Ministerio de Obras Públicas se
verán concentrados en la reconstrucción de puentes, calles y avenidas
destruidas por los torrenciales aguaceros.
El ministerio de salud
pública deberá prepararse para futuras epidemias producto de toda el agua contaminada.
Es momento de reflexionar
y entender que hay cosas que escapan de nuestras manos y están en manos del
altísimo.
Vamos a revisarnos y a
prepararnos para cuando la madre naturaleza nos ataque no repercuta de una
manera tan grande como lo ha sido hasta ahora. La mayoría de los ríos no han
fluido y se han desbordado es por toda la basura que NOSOTROS le arrojamos, es
hora de crear conciencia. Colaboremos con todo el que nos necesite. Llevemos
mensaje de aliento. Pero sobre todo ORAR, el poder de Dios es infinito y cada
cosa que el permite que sus hijos enfrenten es porque sabe que tiene la
capacidad de superarlos.
Feliz Noche y que las
bendiciones y el gran poder de Dios se derrame sobre su pueblo!
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