Álvaro Arvelo hijo, mejor conocido como “Alvarito” o “La enciclopedia humana”, fue una de las figuras más emblemáticas del periodismo y la radio en la República Dominicana. Nació el 1 de noviembre de 1942 en Santo Domingo, en un hogar donde reinaba la educación, los libros y la pasión por el conocimiento. Desde pequeño mostró un talento natural para aprender y memorizar todo lo que leía, lo que más adelante lo llevaría a convertirse en una leyenda de la radio.
Inició su carrera en los medios desde muy joven,
destacándose primero como cronista deportivo y de cine. Escribió en importantes
medios del país como El Caribe, El Nacional y La Nación, y dejó su huella con
columnas muy populares como “Cápsulas”, “Comentario de Cine” y “Tema
Deportivo”. Su estilo directo, profundo y al mismo tiempo ligero, capturaba al
lector desde la primera línea. Pero su talento no se quedó solo en el papel.
También fue un pionero en la televisión dominicana, participando en programas
como “TV Deportes” y “El Gordo de la Semana”, donde su carisma y conocimiento
lo convirtieron en una figura querida por el público.
Una de sus grandes pasiones fue el ajedrez, deporte
del que no solo fue gran conocedor, sino también dirigente, ocupando la
presidencia de la Federación Dominicana de Ajedrez a los 19 años. Además,
publicó varios libros, entre ellos “Anecdotario” y “100 Temas Deportivos”, en
los que compartía historias, análisis y datos con la precisión que solo él
sabía manejar.
Sin embargo, fue en la radio donde alcanzó su
consagración definitiva. Su participación en el programa “El Gobierno de la
Mañana” por Z101 lo convirtió en un fenómeno nacional. Su voz grave, su ritmo
pausado y su manera única de abordar temas tan diversos como historia,
política, cultura, deportes, arte y ciencia, le ganaron el apodo de “La
enciclopedia humana”. Su presencia era tan poderosa que muchos lo consideraban
una universidad del aire.
Frases como “¡Llevátelo Cundo!”, “¡Cuidadito compai
gallo!” y su tradicional “Y… y… y… amanecemos hoy con…” se volvieron parte del
día a día del dominicano. Era amado por muchos, criticado por otros, pero
indiferente para nadie. Su sinceridad sin filtros, su valentía para decir lo
que pensaba y su dominio absoluto del micrófono lo convirtieron en una figura
sin comparación.
A lo largo de su vida, fue merecedor de múltiples
reconocimientos por su trayectoria y aporte al país. Entre ellos, recibió la
Orden Duarte, Sánchez y Mella, fue declarado Hijo Meritísimo de Santo Domingo,
y se le reconoció como uno de los grandes pilares de la comunicación nacional.
Álvaro Arvelo hijo falleció el 21 de septiembre de
2023, luego de una dura batalla contra el cáncer. Su partida dejó un vacío
enorme en los medios de comunicación dominicanos.
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