Hediberto Francisco Pichardo
Santos.MA
Mesopotamia es una palabra
griega que significa tierra entre ríos.
El
territorio que ocupo la Mesopotamia en la antigüedad, se ubica al norte del
golfo pérsico en el occidente del continente asiático y comprende hoy los
territorios de la actual republica de Irak, así como parte de Siria e Irán.
Todos estos territorios están ubicados en el medio oriente, una región rica en
petróleo.
La
Mesopotamia estaba situada en medio de los ríos tigres y Éufrates, por lo que
su territorio era fértil al ser bañadas sus tierras por estos.
En
términos históricos en Mesopotamia surge la escritura hacia el año 3000 a.c.
por lo que sumado al tiempo que transcurre después de Cristo, entonces podemos
señalar que la invención de la escritura tiene aproximadamente una duración de
más de 5000 años.
Dicha
región fue la cuna de las primeras civilizaciones junto a Egipto, situado en el
continente africano.
Sus
habitantes, debido a su ubicación geográfica se dedicaron a la agricultura y la
ganadería.
Al
igual que los demás pueblos de la antigüedad, eran politeístas, esto significa
que adoraban a una gran cantidad de dioses, donde por supuesto el más
importante era el dios del sol.
En
el territorio de la Mesopotamia se establecieron unas 4 civilizaciones, las
cuales eran: los sumerios, los acadios, los babilonios y los asirios. La ciudad
de Babilonia fue muy famosa en la antigüedad, su nombre aparece incluso en las
sagradas escrituras.
De
esas civilizaciones, los asirios fueron los más guerreros, llegando a someter
varios pueblos vecinos.
Los
babilonios fueron los más destacados en lo que a legado cultural y avances científicos
se refiere.
Como
hemos señalados en otros escritos, los pueblos antiguos eran politeístas y
tenían mucho afán en conocer el destino del ser humano. Los babilonios no
fueron la excepción y en ese sentido es importante destacar que ellos
descubrieron los signos zodiacales.
Como
en toda civilización de la antigüedad la educación del individuo dependía de la
posición social a la que este perteneciera, lo mismo ocurrió en las
civilizaciones que se establecieron en el territorio de la Mesopotamia. Allí existía
una clase sacerdotal potente, con una casta casi cerrada. Los religiosos tenían
amplios conocimientos de las matemáticas y la astronomía. Por lo anterior se
puede inferir que la clase sacerdotal era la que recibía la mejor educación.
La
mayor parte de la población como es lógico en ese momento de la historia era
esclava, por lo que su educación consistía en aprender el oficio al que estaban
destinados.
La
educación superior estaba destinada para los miembros de las clases
privilegiadas.
Uno
de los aportes más importantes de los pueblos mesopotámicos a la humanidad lo
ha sido sin lugar a dudas el código de Hammurabi escrito en el 1692 a.c. por el
rey del mismo nombre. Este era un conjunto de leyes o puntos, un total de 182
que reglamentaba toda la vida de dicha civilización.
Este
código actualmente se encuentra en el museo del Louvre en París. Fue
descubierto por Jacques de Morgan en diciembre de 1901 en el actual Irán. Luego
fue llevado a Francia y allí fue traducido al francés por el padre Jean –Vincent
Scheil.
En
conclusión, la educación en la antigua Mesopotamia estuvo a cargo de los
sacerdotes, era una educación clasista, es decir propia para cada clase social
(existían 3 clases: nobleza, súbditos y esclavos), era una educación con
contenido religioso, pero también se desarrolló el aspecto científico y
literario y la gran mayoría de la población (esclavos) no tenían derecho a
recibirla.
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