JORGE EBRO/ elnuevoherald
Donde quiera que se
encuentre Yulieski Gourriel junto a su hermano Lourdes en Haití, no podrá dejar
de pensar en ese día de junio del 2015 en que pisó Panamá para reunirse con uno
de los hombres más importantes en la industria del béisbol: Scott Boras.
Según una fuente de
República Dominicana que se mueve dentro de los círculos de agentes de
peloteros, el mediano de los Gourriel realizó una visita a la nación canalera
acompañado por "alguien importante'' de la isla.
"No hemos podido
determinar quién estaba a su lado, pero se notaba que tenía poder y lo
protegía'', apuntó la fuente. "Pero entre quienes seguimos el mercado
cubano sabemos de esa reunión con Boras y que al menos él obtuvo su residencia
en Panamá''.
Varios correos
electrónicos y llamadas de El Nuevo Herald a Boras Corporation, la entidad más
poderosa en Estados Unidos para la representación de peloteros de Grandes
Ligas, para opinar sobre esta historia no fueron respondidos.
Por su parte, la dirección
de Migración de Panamá negó que Yulieski, tenga residencia en el país.
“Si él dice tener un
carnet de migración de Panamá, que lo muestre, pero puede ser falso porque no
aparece en nuestros registros”, indicó a la agencia EFE el director del
Servicio Nacional de Migración panameño, el comisionado policial Javier
Carrillo, quien explicó que en el país existen denuncias por tramitaciones
fraudulentas de residencias.
De ser falsa la
residencia, el caso del mediano de los Gourriel recordaría, salvando
distancias, al de su compañero de equipo Alfredo Despaigne, quien fue
suspendido de la liga mexicana en mayo del 2014 por portar tres pasaportes
falsos de la República Dominicana.
La supuesta visita de
Yulieski, quien se fugó de manera no aclarada con Lourdes en la madrugada del
lunes de un hotel en la República Dominicana, abandonando a la selección que
participó en la Serie del Caribe, se produjo en un período convulso de su
carrera.
Por esos días se reportaba
que el jugador más conocido del momento en Cuba se había negado a cumplir su
pacto con el Yokohama -dejando sobre la mesa cerca de $3 millones- de la liga
profesional japonesa y había pedido su liberación para no integrar la escuadra
nacional que en agosto finalizó tercera en los Juegos Panamericanos de Toronto
2015.
"¿Imaginas en los
tiempos del otro Castro, de Fidel, si un pelotero dice que no tiene deseos de
jugar con el Cuba?'', preguntó la fuente. "Algo se estaba moviendo para
que Yulieski tuviera el valor de pedir la baja. Algo se movió para que él
viajara a Panamá y se encontrara con Boras. En todo caso no era un encuentro
fortuito, era algo preparado''.
Lo que se habló allí se
desconoce, pero cuando Yulieski retornó a la isla ya poseía documentos legales
de Panamá y se hablaba de encuentros del hijo del legendario Lourdes Gourriel a
altos niveles del gobierno, donde se discutía su caso.
Coincidentemente, Gourriel
padre se encontraba por esos meses en Miami invitado por unos amigos y de
acuerdos con fuentes muy cercanas a la familia, el llamado "hombre de los
momentos grandes'' tuvo contactos informales con evaluadores de talento de al
menos dos franquicias de Grandes Ligas.
FUENTE
DEL BEISBOL
Pero algo sucedió a fines
de julio que impulsó al mediano de los Gourriel a retornar a mediados de agosto
a la preselección del equipo Industriales que se preparaba para nueva Serie
Nacional.
"Todo parece indicar
que le hicieron creer que él sería el primero en firmar de manera legal con el
nuevo pacto de Grandes Ligas que estaría al doblar de la esquina'', comentó un
conocido agente de peloteros cubanos en Miami. "Siempre hubo ese rumor de
que Yulieski había salido y se había reunido con un poderoso representante.
Creo que hubo encuentro en Panamá. Todas las piezas comienzan a encajar''.
Lo que no encajó fue la
proximidad del pacto, a pesar de visitas de Antonio Castro, hijo del ex
gobernante cubano y uno de los jerarcas de la pelota en la isla, y del
recorrido en diciembre pasado de buena voluntad de Grandes Ligas, en el cual se
incluyeron cuatro peloteros cubanos afincados en las Mayores: José Abrue,
Yasiel Puig, Alexei Ramírez y Brayan Peña.
Para Yulieski, que pronto
cumplirá los 32 años -su hermano tiene 22- y batea de por vida en Series
Nacionales para .332 con 267 jonrones, el avance de las negociaciones entre las
Mayores y el gobierno de la isla no acompañaba al ritmo de sus deseos.
Según el patrón de los
peloteros cubanos que buscan abrigo en un tercer país, el próximo paso de los
hermanos será anunciar quién les representará delante de la Oficina del
Comisionado del Béisbol para lograr la agencia libre y negociar un pacto de
Grandes Ligas.
¿Tendrá
acaso Boras ventaja en esta carrera?
"Todo es posible'',
agregó la fuente en Dominicana. "Estamos hablando de un hombre que, de
acuerdo con la revista Forbes, es el agente deportivo más poderoso del mundo,
con más de 170 clientes, entre ellos el cubano José Fernández. No me
sorprendería que ese fuera el próximo anuncio''.
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