Titulo

Ve crísis PRD rumbo a tribunales: MVM con poder en altas cortes; HM indefenso

miércoles, 28 de diciembre de 2011

Publicado por prensalibrenagua.blogspot.com
Por Manuel Soto Lara/ Ciudadoriental.com
Han sido notorias con la designación de jueces en las denominadas altas cortes las grandes dificultades entre el Presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), y su candidato presidencial. Es evidente el poder que tiene el presidente del PRD, Miguel Vargas Maldonado, que logró colocar siete miembros en esas cortes. Incluso, en la Suprema Corte de Justicia, sustituyó la esposa de Hernani Salazar, cercano colaborador de Hipólito Mejía. En su lugar hizo designar a su propia cuñada.

Mientras Vargas Maldonado adquiere poder en las altas cortes, Hipólito no solo se queda sin representación, sino que hace declaraciones que acarrean al menos tres errores principales; a saber: cuestiona la designación, alejándose de los jueces vinculados a su propio partido y se abre frente con los demás jueces.
El segundo error lo constituye el poder que públicamente le reconoció a su adversario Vargas Maldonado, e implícitamente admitió su propia debilidad. Parece haber olvidado que falta por completar la matrícula de los jueces en los tribunales de menor jerarquía. Ahora los abogados del PRD, interesados en ingresar a la judicatura, pudieran andar tras el presidente del Partido, distanciados del candidato.
El otro error que observo es que exhibió la división interna de su partido en la actual coyuntura electoral.  Son errores que a mi juicio pudieran perjudicar electoralmente a Hipólito Mejía.
Para entender las dificultades entre el candidato y el presidente del PRD, se trata de dos gallos de una misma gallera. Y los dos permanecen fuera de su jaula. No es un problema exclusivo del PRD. Eso ocurre en la mayoría de los partidos.
Pero estos rivales tienen entre ellos cuentas pendientes. Recuerden que en el pasado proceso electoral del orden congresual y municipal, mientras el presidente perredeista luchaba para que su partido saliera airoso, Hipólito Mejía parecía apostar a la derrota.
Lo anterior para desacreditar como mediocre la gestión presidencial de Vargas Maldonado. Hipólito parecía regocijado por que, no obstante ser el partido más votado individualmente, no sacó un solo senador. Algunas Senadurías fueron controvertidas. Vargas Maldonado las reclamabas con tesón y ahínco. Hipólito, mientras tanto,  daba declaraciones públicas felicitando a la Junta Central Electoral por la transparencia del proceso.
Ya antes se habían enfrentado en la convención interna para la elección de las autoridades del partido. Luchaban por el control del partido. De esa refriega Hipólito “salió herido”. También salieron lastimados Guido Gómez Mazara y Tony Peña Guaba, aspirantes a la Secretaría General y Nacional de Organización, respectivamente. Otros dirigentes en todo el país salieron con unos que otros “rasguños emocionales”. En su infortunio se consolaron juntos. Ahí comenzaría a resucitar Hipólito. Tal vez Miguel Vargas, mientras luchaba por el control del partido, ignoraba que cavaba su propia tumba.
Luego concurren estos dos colosos perredeista a la convención por la nominación presidencial e Hipólito Mejía sale ganador en circunstancia que aún Vargas Maldonado cuestiona y no acepta.
Cuando el presidente perredeista, Miguel Vargas Maldonado, aspiraba a la nominación presidencial,  gestionó la presidencia de su partido; para evitar que, si él ganaba, en medio de la campaña “el partido anduviera por un lado y el candidato andara por otro”. Como Hipólito es el candidato, parece estar ocurriendo exactamente eso mismo.
En los próximos tres meses esto podría soltar el loco en el principal partido de oposición dominicano. Ello así por las siguientes razones:
Próximamente habrá que inscribir por ante los órganos electorales los siete “diputados de ultramar”. Esa es una facultad, en la mayoría de los casos, de los presidentes de los partidos. En el PRD los inscribe el presidente. De hecho, ahora ya no existe el voto preferencial. El lugar de precedencia en la lista lo asigna quien la hace.
Por eso un grupo de perredeista podría andar detrás de su candidato presidencial y otro detrás del que hace las listas, tanto para integrar la judicatura, como para postular diputaciones del exterior.
¡Otro asunto peligroso! La catástrofe podría estar signada en la designación de los delegados y suplentes a los colegios o mesas electorales. Es otra facultad de los presidentes, como representantes legales de los partidos. Para las próximas  Elecciones habrá que acreditar unos treinta mil, entre delegados y suplentes.
Lo mismo ocurre en ultramar. Hay que designar delegados y suplentes en las tres circunscripciones electorales del exterior; es decir, en la de Estados Unidos; la de la Cuenca del Caribe y Miami, así como en la de Europa. No está claro cómo el presidente del PRD, Miguel Vargas,  le pondrá los delegados y suplentes al candidato Hipólito Mejía.
Si lo que he analizado hasta ahora es poco, lo siguiente podría no serlo. La Junta Central Electoral entregará mucho dinero a los partidos políticos. Ese caudal lo reciben los presidentes de los partidos. De hecho, desde su designación como presidente del PRD Miguel Vargas lo viene recibiendo.
Al Partido Revolucionario Dominicano en el pasado proceso electoral le entregaron unos 150 millones de pesos. Para las próximas elecciones la suma será mayor. El monto a repartir es un medio por ciento del presupuesto nacional. Este año el presupuesto nacional es superior a los anteriores. 
No entiendo mucho de los asuntos internos del PRD; pero hasta donde tengo conocimientos, Miguel Vargas no invertirá de ese dinero ni siquiera un solo peso en la campaña electoral de Hipólito Mejía. Parece que el PRD tiene algunas deudas y gastos fijos administrativos, que pudieran no postergarse.
Otro aspecto que podría suscitar controversias en el PRD es la suscripción de Pactos de Alianzas con otras fuerzas políticas. El presidente del partido es el único legalmente facultado para la firma de los mismos. No estoy convencido de que Miguel Vargas le firmará estos pactos a Hipólito Mejía; no obstante varios partidos que se mantienen  orbitando en torno al PRD en actitud de alianzas.
De alguna manera tendrían estos gladiadores que acortar distancia. De lo contrario, las diferencias llegarían a los tribunales. El candidato presidencial perredeista tiene un miembro en la Junta Central Electoral, pero ya este organismo no dirime las controversias internas en las organizaciones políticas. Ahora es competencia del recién designado Tribunal Superior Electoral, donde Miguel Vargas tiene buena incidencia. Recuerden que ya Hipólito se abrió frente con esos jueces.
En la Junta Central Electoral y demás juntas electorales, ahora instancias administrativas y gerenciales de los procesos electorales, los partidos están representados por un delegado político. La designación de este representante es prerrogativa del presidente del PRD. Ahí también podría haber cambios en los próximos días.
“Entre jueces te vea”.
Por la inscripción de los diputados de ultramar; por la designación de los delegados ente los colegios electorales; por el manejo de los dineros que entregará a los partidos la Junta Central electoral; por la firma de pactos de alianza; por el control del Delegado ante la Junta Central Electoral y las demás juntas, incluyendo las del exterior;  estos conflictos podrían ser llevados por Hipólito Mejía, a más tardar el mes de marzo, a las recién designadas Altas Cortes. Pues Allí mismo, muy bien plantado,  lo podría estar esperando Vargas Maldonado.
En el escenario judicial, a Hipólito Mejía podría hacerle falta alguna cuota de poder. Porque en la actual coyuntura parece que el pleito, al menos en las altas cortes, no será parejo.
Mientras tanto, Miguel Vargas Maldonado, tendría en que entretenerse, si, como ha trascendido, el gobierno, a través del estatal Banco de Reservas,  le desembolsa un préstamo por casi mil millones de pesos para la construcción de una extraordinaria plaza comercial.

No hay comentarios: