SAN CRISTÓBAL, República Dominicana.- Otra vez se repite una de las frases más conocidas del mundo: “Crónica de una muerte anunciada”, en esta ocasión de una joven, que durante los últimos tres años fue tratada como un objeto de propiedad por parte de su pareja, murió a manos Salvador Encarnación, quien le propinaba maltratos físicos constantes.
Linita Romero Novas, de 18 años, luego de haber estado en la intimidad con su concubino, también conocido como “Papá o Niño”, éste le cercenó el cuello con un filoso machete en la residencia de los padres del homicida, quienes son miembros de una iglesia evangélica, y que, luego del hecho de sangre tuvieron que buscar refugio en el destacamento policial de esta comunidad, perteneciente a la provincia de San Cristóbal.
Encarnación, fue apresado luego de durar varias horas prófugo, por miembros de la Dirección de Investigación Criminal, de la Policía Nacional, en la residencia de un pariente suyo en la ciudad de La Vega.
Hace tres meses que Encarnación, estaba siendo perseguido por un contingente de miembros de la subdirección de Investigación Criminal de la Policía Nacional, en la comarca de Palenque y pueblos adyacentes, fue enviado a la cárcel Modelo de Najayo al ser acusado por los padres de la occisa de propinarle golpes contundentes en distintas parte del cuerpo, inclusive de arrastrarla amarrada con una soga en la cola de una motocicleta.
Euclides Romero, padre de Linita Romero Novas, explicó a EL NUEVO DIARIO, que en los tres últimos años, obligaba a la occisa a consumir drogas, y debido al uso constantes perdió hace tres meses una criatura en el vientre, donde se vio obligado a gastar más de 30 mil pesos, en un centro médico privado.
Manifestó que Salvador Encarnación, perseguía constantemente a su hija, y que ella por temor acudía con el victimario a la playa y a otros lugares, donde la golpeaba y la obligaba a sostener relaciones sexuales.
Señaló, que en las primeras horas de la mañana de este miércoles dejó a su hija cocinando en su residencia, y que luego salió, porque el criminal le llamó por la vía telefónica acudiendo a la residencia de los padres de Salvador Encarnación, y pasadas las 05:00 de la tarde fue encontrada en un charco de sangre en una habitación de la residencia, ubicada en la calle Adolfo Cabral, del municipio de Palenque.
Mientras que, pasadas la 08:00 de la noche fue cuando se presentó la médica legista doctora Bélgica Nivar, para ordenar levantar el cadáver, en donde justo al lado estaba el machete con el cual su marido le cortó el cuello.
Cientos de residentes en esta comunidad, acudieron a la vivienda, que su entrada tiene un mensaje bíblico que dice “Dios es Amor”, pero el hijo, conocido como consumidor de drogas y delincuente, antes de penetrar a la vivienda no se percató de la misma.
En la dotación policial del Municipio de Sabana Grande de Palenque, se informó que el victimario Salvador Encarnación “Papá o El Niño”, está siendo buscado para ser investigado en relación al robo de 12 baterías de una vivienda de la comunidad, que supuestamente robó junto a un tal “Cancún”, quien está siendo también perseguido.
Desde anoche un contingente de la Dirección de Investigación Criminal de la Policía Nacional, persigue por toda la costa de Palenque y parajes de la zona a Salvador Encarnación, considerado como un sujeto peligroso.
La médica legista entregó el cadáver a sus familiares, para darle sepultura en las próximas horas.
En tanto que decenas de jóvenes se mantenían en la cercanía de la vivienda donde reposó el cadáver portando bates de béisbol y otras armas blancas, por si se presentaba el matador.
Autor: CARLOS CORPORÁN
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