Por José Núñez Grullón/ Ciudadoriental.com
En el argot hípico se dice que el caballo que sale adelante, que se mantiene puntero y que termina en el primer lugar ha hecho “un punta a punta”.
Eso está pasando con la candidatura del Ing. Hipólito Mejía, porque desde que salió a la escena ha sido liderando la carrera. Salió como salen los caballos triunfadores, con buen brinco y a tiempo. En el trayecto de la carrera hacia la presidencia de la República, el candidato del Partido Revolucionario Dominicano ha ido sorteando los obstáculos que se presentan en la pista política, la cual está repleta de trampas insospechadas, de componendas de aposentos y de estratagemas diabólicas, con el único fin de entorpecer el galope triunfal que lleva el Ing. Hipólito Mejía rumbo al Palacio Nacional para ocupar la primera magistratura de la nación.
Los estrategas contrarios creen que con manipular encuestas van a desviar la atención del pueblo del trote victorioso del único y seguro ganador de la próxima contienda electoral que es Hipólito Mejía, de la cuadra del PRD y con la consigna ganadora: “Llegó papá”.
La mutual Hipólito Mejía-Luis Abinader, deja dividendos formidables que redundarán en beneficio de la gran mayoría del pueblo dominicano.
El fortalecimiento de la candidatura de Hipólito ha llegado a su clímax con la consolidación de todas las fuerzas del PRD y con la integración total del Ing. Miguel Vargas Maldonado, que como presidente del partido le toca la gran tarea de llevar el PRD de nuevo al poder.
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