Por la Policía, lo recibió el coronel Eusebio Escolástico Vargas y lo acompañaron el padre Rafael Muñóz, de la parroquia católica la Altagracia, y comunicadores de este municipio, perteneciente a la nordestana provincia Sánchez Ramírez.
Por Bernardo Robles
Se entregó este sábado en Cotuí el chofer del minibús accidentado en que murieron siete adolescentes en la carretera hacia la Hacienda Estrella.
Tras una semana a la huida, Rufino Ramírez Vargas, de 30 años, conocido como Pelo Fino, se presentó en la tarde ante la comisión de los derechos humanos y varias personalidades locales, quienes lo trasladaron en comitiva a la ciudad de Santo Domingo.
Por la Policía, lo recibió el coronel Eusebio Escolástico Vargas y lo acompañaron el padre Rafael Muñóz, de la parroquia católica la Altagracia, y comunicadores de este municipio, perteneciente a la nordestana provincia Sánchez Ramírez.
A Ramírez Vargas le atribuyen las causas del accidente en el que fallecieron siete niños y adolescentes de Villa Mella, que regresaban de un pasa día en un club campestre de la Hacienda Estrella, Santo Domingo Norte.
Los testigos y sobrevivientes aseguran que el hombre, que se dio a la fuga en el instante, estaba embriagado y que había desoído las súplicas de que redujera la alta velocidad a la que conducía.
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