Isabel Bonilla se pone los pantalones que les faltan a muchos los legisladores; Defiende el derecho de pensar y actuar libremente en la reforma

SANTO DOMINGO.- La diputada oficialista por la provincia María Trinidad Sánchez, Ana Isabel Bonilla se jartó, hasta el punto que anunció que no aspirará a ninguna candidatura en los próximos comicios y no le importa que su partido la sancione.

La asambleísta Isabel Bonilla, representante de la provincia María Trinidad Sánchez por el Partido de la Liberación Dominicana, arremetió este jueves contra sus colegas por los cambios que se están introduciendo en segunda lectura al proyecto de reforma a la Constitución.

Bonilla puso en alto su nombre en una Asamblea Revisora plegada de servilismo y político, partidario y empresarial, en que todo parece nada.

“Yo no dormí anoche”, dijo con voz potente la legisladora del PLD, para a seguida agregar “pensé mucho en retirarme, pero luego recapacité, me quedé toda la noche revisando todas las actas, todas las reformas, capítulo por capítulo y me voy a quedar en este hemiciclo, no por afecto, ni por emoción, sino por lo que yo creo que es correcto”, puntualizó, ante el asombro de sus colegas y periodistas.

Aseguró que “en mi partido, el PLD, quieren quitar cosas y yo ni por mandato imperativo, votaré por nada de lo que yo no tenga conciencia”.

Destacó que “para los líderes de los partidos, mientras más bruto lleguen los legisladores aquí mucho mejor, porque no tienen cerebros para pensar, y si por todo esto mi partido me sanciona, yo aceptó la sanción”.

Se quejó de que sean modificados aspectos sancionados en primera lectura y muchas conquistas, como que sea el Congreso que elija la Cámara de Cuentas, que se mantenga la carrera del Ministerio Público, los derechos colectivos, el mandato imperativo del legislador.

"Y ni por mandato imperativo yo me voy a prestar a votar por esta contrapropuesta que están haciendo en segunda lectura y si el partido al que pertenezco y al que he sido fiel me sanciona, también acepto la sanción disciplinadamente", indicó.

Mostró su creencia en que en que los legisladores deben defender a la gente que caminó con ellos por callejones y por las calles y no estar legislador por mandato imperativo.

“Yo no digo que los partidos no puedan orientar, asesorar, pero tendrán que oírnos, dejarnos pensar, no mandarnos a decir lo que tenemos hacer”, apuntó.

Aseguró que “muchos aquí piensan igual que yo, pero no lo dicen por miedo, por temor o quizás piensa muchos por la coyuntura políticas, temen calentarse”.

"Hice el trabajo de comparar la Constitución vigente, la que estamos haciendo, la primera y la segunda lectura y determiné quienes son los ganadores de esta reforma, qué hemos perdido y si hemos ganado algo estamos pagando un precio muy caro, por lo poco que estamos ganando; porque este Congreso lo que está ganando es el repudio de la población, no representada por las decisiones que se están tomando aquí", concluyó.

Fuente: vigilanteinformativo.com