Wilfredo Mora, presidente de la entidad, dijo que el caso ha sido mal manejado, debido a que no estuvieron presentes los investigadores, ni se procedió a ir al lugar de cautiverio para tomar las primeras huellas del hecho.
Precisó que tampoco se les han hecho los análisis médicos, psiquiátricos y criminalísticos al secuestrado para formar las hipótesis criminales que permitan confirmar o descartar el autosecuestro, una negociación paralela, o si
Sostuvo el experto criminológico, la rueda de prensa debió contar con la lectura de un informe de peritos forenses del Instituto Nacional de Ciencias Forense (INACIF).
“En dicho informe oficial, hay que mostrarle al público la escena del crimen, con fotografías, distancias, los elementos a los que aludió el secuestrado y objetos de los secuestradores, para dar una idea de sus perfiles y del patrón de conducta en el lugar, por el tiempo que duró el secuestro”, indicó.
Mora afirmó que se debió presentar las preguntas clave, en este caso probar la última vez que se afeitó, mostrar dicho aparato, fotografías del cuerpo luego de la huída, de la cara, pelos, manos, uñas, al momento de ser encontrado, examinar las esposas que dijo saber quitarse, y hacer luego una demostración para los forenses, y luego en público.
“Desde el punto de vista psicológico, se evalúan los postulados de la depresión, el stress agudo, el estado general o condición mental, debiendo explorar todos estos elementos juntos. En la entrevista médico-psiquiátrica no hay que descartar nada, está la condición biológica y luego preparar un historial de salud de la víctima que ha estado en cautiverio” puntualizó.
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