La vencida
El presidente Leonel Fernández se reunió en tres ocasiones con Miguel Vargas antes de concretarse el acuerdo que firmaron ayer en el hotel Jaragua. Los encuentros se realizaron en el apartamento que ocupa en
Los reformistas se muestran sorprendidos, se dejan dar cuerda de los medios y algunos reaccionan por lo bajo de mala manera. Sin embargo, en el caso no hubo engaño, pues el mandatario les había hecho saber que estaba interesado en integrar a los perredeístas al llamado Proyecto de Nación.
Se quejaban de que se les usara como bisagra para abrir o cerrar puertas, ahora no lo serán. Temen que baje su “cotización”, pero sólo de aquellos que no tengan suficiente talento y proyección. La idea no es dejarlos desnudos y en la calle…
Consentido
El presidente Leonel Fernández había consentido en una regla no escrita de que ningún peledeìsta podía reelegirse por una tercera vez consecutiva, según reveló en una ocasión Danilo Medina, que se supone parte interesada. En el acuerdo con Miguel Vargas lo está reiterando o consagrando, de manera que internamente rompe el posible entaponamiento.
Vargas firmó -cuando corrió la primera vez por la presidencia de
Fernàndez y Vargas, por tanto, están siendo coherentes y fieles a sus compromisos internos. Se partía del presupuesto de que el mandatario pretendía un cuarto mandato, pero si la reforma se hace como acaba de preverse, ese cálculo falló. Vargas estuvo orientando a sus seguidores en
La coherencia
El propio Hipólito Mejía fue coherente cuando no quiso involucrarse directamente en una discusión que no le compete desde el momento que se abanderó junto a los suyos como Corriente Institucional.
Parece no ser verdad tanta belleza, pero cuando conviene saca el cuerpo, y lo hace bien, como podría ser ahora con el Acuerdo entre Miguel Vargas y el Presidente Leonel Fernández. La puerta que se le abre, no fue forzada por él o por sus seguidores, sino consecuencia de las circunstancias y del juego de otros. No podrá convencer a nadie de que no sabía de que lo que se traía entre manos Vargas, pues de seguro que fue puesto en auto de lo que se movía por debajo.
No debe olvidarse de que este giro táctico se realiza después de acercamientos y entendimientos con sus oponentes internos, principalmente con el mismo Mejìa. De seguro que no hubiera reaccionado como lo hizo, si Vargas hubiera actuado a sus espaldas y no le hubiera por lo menos adelantado su plan. Además, el Acuerdo estaría corrigiendo su despropósito del 2002 cuando provocó una reforma para restablecer la reelección…
La atención
Hipólito Mejía podría resentirse por no haberse apoderado en la ocasión de las candilejas y que todo el protagonismo fuera de Miguel Vargas. Pero culpas de él y no de España, puesto que esa posibilidad fue barajada, y al parecer no encontró manera de hacerlo y quedar bien librado. Los legisladores estuvieron siempre con Vargas, y no era factible negociar con lo de otro. Sin embargo, no tiene porque apenarse.
Lo mejor en política es cuando otro recoge sus platos rotos, y más o menos fue lo que hizo ahora Vargas al lograr que se vuelva a la fórmula consagrada en la reforma constitucional de l994 de la no reelección consecutiva…
No hay comentarios:
Publicar un comentario