Por
Rosa A. Rodríguez C.
Poco a poco dominicanos y extranjeros van descubriendo que es cierto eso de que República Dominicana es mucho más que Punta Cana y tal y como dice el slongan promocional de nuestra marca turística, este país “lo tiene todo”. A solo tres horas en autobús de Santo Domingo, se encuentra uno los lugares más bellos de la isla: El municipio Cabrera.
Ubicada en la provincia María Trinidad Sánchez, es
conocido por sus hermosas playas, sus monumentos y piscinas naturales, su
gastronomía, así como las diferentes actividades de ocio y descanso que se
pueden realizar allí.
En la entrada del municipio, los visitantes son
recibidos con letrero gigante construido en cemento con el nombre “Cabrera” que
destaca por el mar que tiene de fondo y describe toda la ciudad como “El
paraíso del nordeste”. Como destino, ofrece una mezcla equilibrada entre la
tranquilidad y la aventura.
Sus
playas
Entre sus playas, hay dos que destacan de entre todas
las playas dominicanas. Por un lado está la “Playa Arroyo Salado”, popularmente
nombrada como “Playa La Boca” debido a que en una parte de ella el agua del río
–también llamado Arroyo Salado- desemboca en el mar y de manera natural, en la
arena.
Además de esta característica especial, es considerada
una de las favoritas de la ciudad por el azul turquesa de sus aguas y la
hermosa vegetación que posee en los más de 4 kilómetros de extensión que tiene.
Por otro lado, se encuentra la Playa Los Cocos, la
segunda más popular. Su nombre le hace justicia porque -presisamente- se
caracteriza por los cientos de palmas de coco que se encuentran desde las
diferentes entradas que tiene hasta pocos metros de la orilla del mar.
Sus
Monumentos Naturales
La Laguna Dudú es probablemente uno de los monumentos
naturales más importantes y conocidos a nivel turístico. Es uno de los lugares
por excelencia que distinguen el municipio de Cabrera, por lo que recibe
cientos de visitas de turistas y locales.
Quienes han visitado el lugar, aseguran que aunque su
entrada no es muy impresionante, una vez se está cerca de la laguna de agua
dulce, la sensación que inspira es la de estar en el paraíso.
El espacio fue ambientado para brindar entretenimiento
pero respetando sus recursos ecológicos. Cuenta con estacionamiento, áreas para
acampar, jugar voleibol, hacer actividades al aire libre, un zipline de 10
metros de altura para caer sobre el agua y también un restaurante. Otro dato
interesante es que está ubicada cerca de varias playas.
La entrada a la laguna cuesta RD$200 y está abierta al
público de lunes a domingo de 8:00 de la mañana a 6:00 de la tarde
El lago Agua Azul, es otro de los monumentos naturales
de los que Cabrera pude presumir. Su nombre está inspirado en el color
turquesa. Sus transparentes aguas permiten ver el fondo de la laguna, las rocas
que la caracterizan e incluso las raíces de algunos de los árboles que adornan
su entorno.
Este lago está ubicado en el Distrito Municipal de La
Entrada y forma parte de una propiedad privada, de manera que para entrar al
mismo hay que pagar tarifa de $100 pesos.
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