Héctor
Gómez
En la historia del béisbol
otoño-invernal dominicano han desfilado grandes jugadores, quienes han dejado
un legado de calidad incuestionable en los distintos equipos que conforman la
Liga Dominicana.
En ese tenor, vale
destacar en grado superlativo las históricas temporadas de Felipe Rojas Alou
(1958-59), el norteamericano Ralph Garr (1970-71), Mateo Alou (1968-69), Manuel
Mota (1963-64) y Miguel Diloné (1976-77).
Felipe
Alou, Leones del Escogido, 1958-59
En el torneo 1958-59,
Felipe Rojas Alou, vistiendo el uniforme de los Leones del Escogido, su equipo
de toda la vida, registró la mejor actuación ofensiva de un jugador en la
historia de la pelota invernal dominicana.
En la referida campaña,
Felipe bateó para un astronómico promedio de .351, al disparar 61 hits en 170
turnos, entre ellos 17 dobles, 5 triples y 7 cuadrangulares, empujó 43
carreras, anotó 45 y se robó 14 bases. Ganando departamentos ofensivos, tales
como el título de bateo, carreras remolcadas, anotadas, hits, dobles y bases
robadas, fue co-líder en triples.
En el aspecto defensivo,
el "Panqué" de Haina se lució a la defensa con su elegancia en los
jardines, y un preciso brazo de "cañón".
Ralph
Garr, Estrellas Orientales, 1970-71
El estadounidense Ralph
Garr, refuerzo de las Estrellas Orientales, también tuvo una actuación
histórica en la temporada 1970-71, estableciendo varias marcas ofensivas, las
cuales aún se mantienen vigentes en la pelota invernal dominicana.
En esa temporada, Garr
terminó como un astronómico promedio de .457, fruto de 105 hits en 230 turnos
oficiales, se estafó 23 bases, remolcó 24 carreras, anotó 58, 12 dobles, 4
triples y 3 cuadrangulares.
Lideró los encasillados de
bateo, hit, carreras anotadas y bases robadas. Su promedio de bateo en dicha
temporada, además de sus totales de carreras anotadas y hits son récords
ofensivos en nuestro béisbol.
Mateo
Alou, Leones del Escogido, 1966-67 y 1968-69
En la temporada 1966-67,
el mediano de la trilogía Rojas Alou, tuvo una extraordinaria actuación al
lograr su primer título de bateo (.363) y liderar los renglones de carreras
anotadas (34) y bases robadas (15).
Asimismo, en la temporada
1968-69, Mateo ganó el liderato de bateo con un astronómico .390. Disparó 62
indiscutibles (líder) en 221 turnos ofensivos, incluyendo 10 dobles y 4
triples, 21 remolcadas y 20 anotadas. Como dato curioso, en esa temporada apenas
se ponchó en dos ocasiones.
Manuel
Mota, Tigres del Licey, 1963-64
En la campaña de 1963-64,
Mota concluyó con average de .379, con 74 hits en 195 turnos, 25 carreras
remolcadas y 26 anotadas.
Ganó los lideratos de
bateo y de hits. Repitió como líder de bateo (.364) y de hits (72) en el torneo
siguiente, conectó 10 dobles y 3 triples, remolcó 18 carreras y anotó 26.
Águilas
Cibaeñas, 1976-77
Miguel Diloné, el más
excitante jugador que ha tenido nuestro béisbol, tuvo su mejor actuación en la
temporada 1976-77, cuando bateó para promedio de .344.
En 221 turnos disparó 76
hits, anotó 47 vueltas y empujó 18, se robó 44 bases, marca histórica en el
béisbol invernal dominicano. Lideró la liga en carreras anotadas, hits y bases.
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