Escuché enfrascados en una
acalorada discusión política, en un programa de televisión, a dos colegas
periodistas uno que abogaba por Roberto Salcedo y el otro por Domingo
Contreras. Uno de ellos decía que al PRM y a Fello le convienen batirse con el
que está más desgastado en la alcaldía y el otro ripostó diciendo que
verdaderamente a quien le convendría es al novato, porque la lucha sería de
igual a igual. Pero a Fello, y ello nos consta, el tiempo no le alcanza para
dedicar oídos a dimes y diretes que se dan en el litoral morado, mucho menos
para detenerse a escoger a su contrincante, porque además del dos veces alcalde
estar preparado para lidiar con cualquiera de los aspirantes que escoja el PLD,
su trabajo está concentrado en la elaboración de su propuesta de gobierno
municipal, la cual contempla rescatar las obras que la administración
peledeista ha abandonado.
Fello, quien se perfila
como el representante a la alcaldía por el Partido Revolucionario Moderno está
recorriendo todos los rincones de la capital, haciendo énfasis en los lugares
donde sembró una obra, la cual cuando llega observa que esta fue destruida o en
su lugar se hizo otra cosa.
Por su impronta y porque
volverá a dirigir los destinos de la capital es que el doctor Rafael Suberví
Bonilla está recibiendo el respaldo de grupos de persona, en su mayoría mujeres
y jóvenes, quienes participan de cada una de las caravanas que organiza su
proyecto político. Esos muchachos y muchachas a sus cortas edades solo han
visto gobernar al PLD, por lo que expresan el deseo de que en el país y en
especial en la capital haya un cambio de rumbo y de políticos.
Suberví Bonilla ha
mostrado su satisfacción satisfecho con el apoyo tributado por más del 80% de
la dirigencia política de su partido en la capital. La mayoría de los
presidentes regionales y de base, los frentes de masas compuestos por mujeres y
juventud son los tres sectores que han dicho presente y han cerrado fila al
lado del doctor Suberví Bonilla.
En cada recorrido, Fello
frunce el señor cuando observa la destrucción o abandono de una obra ejecutada
por el cabildo que dirigió, la cual costó esfuerzo, sacrificio y sobre todo,
mucho dinero.
Dijo no explicarse, cómo
una obra tan bella y digna, como el “Bulevar de las Estrellas”, localizada en
el centro de la ciudad capital, en donde el propio síndico posee una como
profesional del arte, haya sido abandonada por la actual gestión peledeista.
Hay que recordar que sin
existir la ley que creó el Presupuesto Participativo Municipal (PPM) y dirigir
en dos oportunidades una ciudad grande con dos gobiernos en contra, Fello logró
hacer las obras que demandaban los munícipes y las organizaciones comunitarias
de cada barrio.
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