Por Servicios Combinados
La poderosa e influyente conductora televisiva estadounidense Oprah Winfrey había dicho que antes de retirarse quería entrevistar al polémico O. J. Simpson. Y lo logró.
Su deseo, en particular, era que Simpson le confesara el crimen que supuestamente cometió al matar a su esposa y del que fue absuelto en 1999.
Ni corto ni perezoso, el productor de su programa fue hasta la cárcel para intentar convencer a Simpson de que confesara la verdad a todo el auditorio y en vivo.
Según el diario “Daily Mail”, Simpson aceptó su culpabilidad y confesó que aunque hubiera sido declarado inocente, efectivamente él mató a la que fuera su esposa años atrás.
“Dile a Opra que sí, que lo hice. Maté a Nicole, pero fue en defensa propia. Ella me atacó con un cuchillo y yo tenía que defenderme”, fueron las palabras que supuestamente O.J. le dijo al productor del programa de Oprah, según una fuente no revelada por medios estadounidenses.
“Ella gritaba que me fuera y movía el cuchillo alrededor mío”, se alega que O.J. le dijo al productor.
Para Winfrey esta confesión ha sido un logro histórico.
Según trascendió, Oprah ha estado en contacto con O.J. durante el pasado año.
Además, se asegura que el exfutbolista es un gran fanático de ella. Sin embargo, por mucho tiempo se había negado a revelar si en efecto cometió el crimen o detalles de qué había pasado esa noche.
Por el sillón de Oprah han pasado un sinnúmero de personalidades, pero todavía le falta una entrevista que no ha podido conseguir.
Opra aspira entrevistar a Susan Smith, conocida en Estados Unidos porque aseguró que sus hijos habían sido secuestrados por un hombre de color y después resultó que ella misma los había empujado dentro de un lago en un auto.
“Cambió la forma en que la gente ve a los papás que pierden a sus hijos”, razonó Oprah.
Hace unos meses, Oprah decidió dar un paso nuevo en su carrera como presentadora de televisión, tener su propia señal de cable.
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