A raíz de las polémicas que han surgidos por los salarios que devengan los congresistas el lector Orlando Emilio Sánchez, nos ha enviado esta opinión

Por Orlando Emilio Sánchez

Parece mentira que los representante del poder legislativo aquellos que han jurado defender los intereses del pueblo dominicano sean los primeros que desvalijan las arcas públicas, eso si, sin infringir las leyes que tan astutamente ellos promulgan.

Tenemos que ser conscientes y saber que en la república dominicana no se pagan gran cantidad de impuesto, si lo comparamos con las grandes potencias, pero parece ser que estos( paupérrimos impuestos) son lo suficiente para manejar la cartera dominicana y que de paso a ayudar a que siga aumentando la deuda externa.

Me da asco y vergüenza ajena leer sobre la falta de civismo, de dignidad, de vocación y de falta de responsabilidad de tan “DISTINGUIDOS SEÑORES Y SEÑORAS”, que se pelean por un dinero que no les pertenece y que están obligados a proteger y cuidar. Comparto el pensar del vocero Peledeistas Domingo Páez , Y ESPERARÍA , aunque muy ingenuo soy que pensar como este se transmitiera como una epidemia entre la clase política de la república dominicana.

Para que el que lea esta súplica cuan pregonero fuera hago textual las palabras del señor Domingo Páez: Mientras el vocero de los diputados peledeistas Domingo Páez, dijo que los legisladores son groseramente privilegiados", por lo que entiende que la discusión sería un disparate. "Mi posición personal es que debemos ganar menos.

Yo creo que un legislador en la República Dominicana es un hombre ultra privilegiado. Nosotros somos groseramente privilegiados y por vía de consecuencia no nos luce estar metidos en un debate público planteando si uno gana más o si uno gana menos.

Si los señores legisladores pusieran igual interés en promulgar leyes y proyectos y de igual forma fueran interesarse por el bienestar y los intereses del país otro gallo cantaría. Esperemos que tan “digna” acción no sea secundada por otros gremios de profesionales que cada cierto tiempo se rifan las arcas públicas por que parece ser que la recaudación dominicana es de unos cuantos privilegiados.

Mientras estos se pelean por lo “AJENO”, el dominicano de a pié sigue cruzando el Niágara en bicicleta, pero sin rueda, y convirtiéndose en malabarista para poder llegar a mediado de mes (en el caso de los que devengan un sueldo), y de verdadero magos aquellos que no han tenido la gracia del pueblo y de convertirse en ilustres miembros del círculo de los senadores y diputados. ¿Por que también no se preocupan por que las demás personas tengan una pensión; que la sanidad pública pueda competir con la privada: que el sistema educativo sea eficiente; que las carreteras estén en optimas condiciones, pero sobre todo el de dar ejemplo con sus acciones y devolverle la ESPERANZA al pueblo dominicano?, roguémosle al todo poderoso para que nos ayude porque los que hemos elegido se han olvidado para lo que fueron votado; que así sea.