Hostos, Provincia Duarte.- Robos, drogas, armas ilegales son los actos que a diario viven los residentes de aquí, huérfanos de autoridades municipales como gubernamentales al igual que una exigua protección policial.
Los robos continuos donde no escapan sectores del municipio, donde ya ni siquiera los tinacos instalados en los techos de las viviendas se salvan de los cacos en la población, conscientes estos de que un solo efectivo duerme en la dotación.
Los delincuentes, todos conocidos en la comunidad, armados con revólveres y pistolas también robadas se pasean por las calles del municipio cual si fuere un trofeo, siempre drogados, evidenciando la falta de autoridad que acusa el municipio.
Empero, los funcionarios locales, municipales y provinciales, ajenos a estos males como si fueren extranjeros en la comunidad, donde la negligencia y apatía es la razón para el pago que reciben mensualmente.
Los robos que sin importar la hora, son cometidos por los desamprensivos convencidos de que no habrá persecución contra ellos. Recientemente fueron sustraídos toso los cables del tendido eléctrico de la aún no entregada reparación de la escuela Luis A. Weber, donde cargaron con otras pertenencias de la obra.
Igualmente, le fue robado el camión Daihasut a un parcelero de la zona de Acicate, que pese a la voz de alarma y correrías de lugareños no hubo forma de detener a los cacos, el destacamento policial con un efectivo y sin teléfono hizo que los cacos huyeran.
En cuanto a la venta y consumo de drogas, esta es de público conocimiento de las autoridades competentes, empero, nada se hace contra ese flagelo, donde se conoce de la complicidad de
Se conoció éste sábado de la llegada de una inusual venta de narcóticos, sin embargo nadie denuncia ni hace nada, la fiscalía del municipio siempre acéfala, ya que su representante no es de la comunidad, empero, las autoridades gubernamentales no dan por aludidas.
En el pueblo ya no hay puntos de drogas, todo el municipio cualquiera consigue estupefacientes sin importar la presencia de personas algunas, la venta es pública al parecer ante el temor que infunden los que la comercializan, siempre armados de chilenas u otras artefactos robados.
Esto, en momentos que la población observa el bienestar que acusan todos los funcionarios locales en el municipio, todos, municipales, regidores, al igual que empleados del gobernante partido, donde muchos cobran hasta en tres y cuatro entidades, empero, los reclamos y necesidades del pueblo no son atendidas.
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